Superprestigio Dirt Track
Las estrellas acudieron a la llamada del Palau Sant Jordi y el ambiente en los boxes para enmarcar. La manera como Maverick Viñales, Aleix Espargaró, Tito Rabat, Ricki Cardús, Julián Simón y el largo etc de mundialistas presentes en el Sant Jordi salían a ver las carreras de sus compañeros y rivales cuando les tocaba descanso lo decía todo. Todos querían estar en la gran final para verse las caras contra el campeón americano Brad Baker y su KTM.
Entre los primeros en caer estaban el Campeón de Moto3, al que varias caídas y toques le impidieron luchar en sus mangas y Álex Rins, que a punto estuvo de entrar en la final después de protagonizar una repesca espectacular en la que dominó de principio a fin. En la última vuelta, en una dura pugna con Christian Iddon, se fueron los dos al suelo perdiendo todas las opciones de lograr el único billete disponible para la final. También se quedaron fuera Álvaro Bautista y Bradley Smith.
En la final no ha habido sorpresas y Marc Márquez se ha impuesto, seguido por Tito Rabat y por Kenny Noyes. El cuarto en obtener billete para la Superfinal contra los pilotos de la categoría Open ha sido Aleix Espargaró. Mientras tanto, Brad Baker ha dominado con mano de hierro la categoría Open, donde no ha cedido ni una de las mangas disputadas a sus rivales.
El espectáculo para la gran final estaba, pues, asegurado. Todo el mundo quería ver el duelo de los dos números 1, y la verdad es que la expectación estaba justificada. Marc Márquez y Brad Baker se han destacado rápidamente del resto de pilotos para pasarse y volverse a pasar, sin tregua, hasta que Marc Márquez, al que se veía mucho más forzado que al americano, se ha ido al suelo en uno de los muchos toques que han protagonizado. “Lástima de la caída, pero estoy contento por el espectáculo, porque nadie se ha hecho daño y porque hemos visto que no estamos tan lejos de los americanos”, ha declarado Marc tras acabar la carrera.